jueves, 17 de mayo de 2012

Opinión personal

La obra me ha sido un tanto complicada de entender, me ha costado bastante leerla, sin embargo he comprendido bien la trama.

En la obra hay partes más cómicas como las intervenciones sin sentido del Idiota, pero también hay partes más trágicas, como puede ser al principio de la obra la muerte de la hermana de Pedro Gailo.


Hay escenas que me han llamado la atención, por su brutalidad, como la escena final, en la que María Gaila, aparece desnuda en un carro, después de que sus ropas le fueran despojadas por vecinos del pueblo, también la escena en la que el Idiota es devorado por los cerdos.
Creo que esta obra es tremendamente atrevida y arriesgada para la época en la que fue publicada.
Pese a todas las escenas "fuertes" que esta obra contiene, muestra perfectamente como es la sociedad en las aldeas gallegas de la época: el moralismo, la rígida tradición, las férreas creencias religiosas, la hipocresía general ... Algunos de estos aspectos en la actualidad han desaparecido como el el caso de la rígida tradición, pero en otro caso el de la creencias religiosas siguen dejando huella en las personas más adultas, aunque en las jóvenes está desapareciendo casi completamente.



Contextualización crítica de la obra

 En estas dos páginas que expongo a continuación se puede obtener información sobre Divinas Palabras y Valle-Inclán, en ambas incluyo la bibliografía utilizada para elaborar este trabajo y una serie de críticas:

http://www.mister-wong.es/user/NoeliaCostas/
http://www.diigo.com/user/noeliacostas

miércoles, 16 de mayo de 2012

Contextualización literaria


 A principios del S. XX el teatro se rige por los gustos del público burgués y surgen dos tendencias: el teatro de éxito comercial y el teatro renovador.

El teatro comercial esta destinado a satisfacer las exigencias del público.
 Es un teatro cómico o melodramático, huye de los planteamientos ideológicos pero conserva las formas dramáticas tradicionales. El autor más conocido es Jacinto Benavente.
 El renovador, cambia totalmente de formas y de temas y no se supo valorar hasta pasados unos años. Los autores más destacados son Valle-Inclán y García Lorca.

El teatro renovador fracasó al intentar atraer al público. Ahora, es el más apreciado. Sus autores más importantes fueron Valle-Inclán, García Lorca, Unamuno y Jacinto Grau.
El tema principal de Miguel de Unamuno son sus inquietudes espirituales y filosóficas.
Jacinto Grau, escribe obras de tema histórico y literario como El señor de Pigmalión, en la que un artista, Pigmalión, crea unos muñecos que se acaban revelando contra su creador.

Escrita con plena libertad creadora, aunando una querencia medieval con las corrientes vanguardistas de la época,  Divinas Palabras sobrepasa los límites del drama para ofrecer un texto de lectura imaginativa, sensorial y profunda

Valle Inclán con el nombre del esperpento designa una nueva forma de ver el mundo, ya que deforma sistemáticamente y distorsiona la realidad para presentarnos la imagen real que se oculta tras ella. Para ello utiliza metáforas, humanizando objetos y animales y animaliza o cosifica los humanos. La deformación alcanza a los personajes, convirtiéndolos en seres grotescos y tratados como fantoches y marionetas, al lenguaje y a los escenarios. Con la intención de reflejar lo absurdo de la realidad y la vida española de la época.

Por otra parte, la figura de Séptimo tiene muchos rasgos satánicos lascivia, presunción, soberbia, envidia, avaricia, etc. Es asesino, mentiroso. Sobre todo la relación se establece claramente en las conversaciones con el sacristán, entre burlas y veras, y en concreto en el tema del "querer saber" —conocimiento del presente, del pasado y del futuro—, que el demonio no pudo lograr, simbolizado en el ojo tapado de Séptimo y en los animales que le acompañan, amaestrados para adivinar el porvenir.

En España parece no estar muy bien valorada la literatura de género, los libros que sólo buscan el noble arte del esparcimiento, de divertir al lector sin más pretensiones. En los últimos años están surgiendo, sin embargo, una serie de autores que han echado el ojo sobre la literatura popular, que no se avergüenzan de tratar historias de terror, de ciencia ficción, aventuras o policíacas sin lecturas socio-políticas o cualquier otra exigencia culterana de por medio.

Javier Márquez Sánchez es una nueva voz aparecida en este ámbito, que se espera que prosiga por esta vereda y no se pierda, como otros con anterioridad, en objetivos más elevados pero menos entusiastas para el lector. En esta su primera novela de ficción, La fiesta de Orfeo, Márquez realiza un extremadamente divertido pastiche temático,aunando satanismo, la novela detectivesca y la recreación cinéfila, en un ejercicio no tan fácil como pudiera parecer en un inicio.




Contextualización histórica

Desde 1875, la vida política en España se regía por la alternancia pacífica en el poder de los dos grandes partidos, el liberal y el conservador, oligarquía, fraude electoral y caciquismo es la tónica del sistema conocido como restauración borbónica. 

Nunca llegó a ser un sistema plenamente democrático.
Durante el reinado de Alfonso XXIII y la regencia de María Cristina el sistema alcanzó su consolidación.
En 1898 con la pérdida de las últimas colonias españolas, estalla una única crisis con la que comienza el declive del sistema.
Una de las repercusiones de la crisis fue la aparición del regeneracionismo, movimiento intelectual y critico que rechazaba el sistema de la restauración  al considerarlo un lacra para el pueblo de España. Pero no consiguió llevar a cabo las reformas anunciadas. 
Durante el reinado de Alfonso XXIII, se manifestarán una serie de problemas en diferentes aspectos de la vida española que van mermando un régimen que acaba desembocando en la dictadura de Primo de Rivera.

El gran desarrollo económico de las regiones periféricas contribuyó al desarrollo del nacionalismo periférico y al aumento de las luchas sociales: mayor conciencia de la clase obrera y aumento de  su capacidad de movilización.
También reaparece el conflicto religioso, el anticlericalismo se fue extiendo a parte de la opinión pública urbana.

Por último cabe mencionar el problema colonial. Desde finales del S.XIX el interés por el Reino de Marruecos había ido aumentando. España se embarcó en una aventura, la guerra del Rif, que le consumiría ingentes cantidades de tropas y recursos.






Contextualización de la obra

El camino hacia el estreno de las obras fue difícil y tortuoso para Valle. Tanto es así que su esperpento más admirado y elogiado hoy en día, Luces de Bohemia, tuvo que esperar muchos años hasta que finalmente fue llevado a un escenario.
Pero todavía más tardíamente, no lejana ya la fecha de su muerte, seguía sin conseguir haber hecho más aceptables para los espectadores sus producciones dramáticas, Así lo hace saber José Montero Alonso en una entrevista realizada en 1930 y publicada en La Novela de Hoy: "Yo escribo de forma escénica, dialogada, casi siempre. Pero no me preocupa que las obras puedan ser o no representadas más adelante".

Esta dificultad de de representación a la que me refiero, inherente, cabe afirmar, a toda la producción dramática valleinclanesca no es tan ajena a Divinas Palabras, la obra, junto a Luces de Bohemia,  más conocida y aplaudida por el público actual.

Divinas Palabras vio la luz en 1920, en los folletones del diario El Sol, apareciendo después como libro independiente en ese mismo año, editado por la tipografía Yagües. 1920 es una fecha clave en la producción literaria de don Ramón. Durante ese año se publicaron algunas de las mejores obras del escritor gallego.

El escritor (cumplidos ya los 50 años) se encontraba en plena madurez literaria e artística. Sin embargo, Valle no consiguió llevar a la escena su Divinas Palabras. Y no lo consiguió hasta trece años más tarde.
Tras una lectura pública, celebrada el 24 de marzo de 1933, la obra se estrenó el 16 de noviembre de 1933 en el Teatro Español de Madrid. Fue llevada a cabo la representación por la compañía de Margarita Xirgu y Enrique Borrás, la escenografía fue encargada a Castelao y la adaptación y dirección a Cipriano Rivas Cherif.

Mas de nuevo el éxito se le escapa. La obra vuelve a ser "obra de una noche" y no dura en cartelera siquiera unos días. Un crítico de dicha velada, Juan Chabás, así lo refiere: "La obra de Valle Inclán no gustó al público. Le aplaudió sin gran entusiasmo, y no faltaron protestas irreverentes". Así también recuerda, amargamente, Luis Cernuda una noche de representación de la obra: " No olvidaré una noche de segunda representación en el Teatro Español de Madrid de Divinas Palabras. Apenas sí asistían unos pocos espectadores, ocuparon algunas butacas de las dos primeras filas".

Las cosas habían de ser de manera muy diferente en el importante reestreno de la obra llevado a cabo en Madrid, el 17 de Noviembre de 1961. El local elegido para esta ocasión fue el Teatro Bellas Artes y la adaptación corrió a cargo de Gonzalo Torrente Ballester. Dirigidos por José Tamayo, los actores de la compañía Lope de Vega, Nati Mistral, Manuel Dicenta, Alberto Mendoza ... lograron un éxito total, completo, haciendo conocer por fin al público a don Ramón como autor teatral.

El existo, como vemos, fue de auténtica excepción. El sentido d la obra valleinclanesca parecía ya calar en la mente de los espectadores españoles. No hay que olvidar sin embargo, que a esa revalorización de Valle contribuyeron diversos factores. Fue debida, en primer lugar, a la propia y enorme valía de la obra dele escritor gallego, pero también a la evolución del espectador teatral, ya más acostumbrado a obras innovadoras, que se salen del tipo de teatro predominante durante mucho tiempo en las carteleras españolas. Contribuyó también el hecho del mayor acercamiento al gran público de las obras de Valle. Precisamente a partir de 1960 empezó a reeditarse en colecciones de gran difusión gran parte de su corpus literario, ya, en algunos casos difícil de encontrar.

También de merece la pena destacar ene este sentido las llamadas de atención que desde diversos medios hicieron escritores, críticos e intelectuales del momento, creando un clima de aceptación y reconocimiento de la producción valleinclanesca.

Divinas Palabras es considerada en lineas generales por la crítica como la obra que sigue el camino iniciado por Valle con las Comedias Bárbaras, donde Galicia es el fondo es el fondo en el que se desarrolla toda la acción. El escritor gallego ha abandonado ya casi por completo reminiscencias y elementos que unían sus creaciones anteriores con una tradición aristocrática decadente.


Representaciones más destacadas

La obra fue estrenada el 16 de noviembre de 1933 en el Teatro Español de Madrid, dirigida por Cipriano Rivas Cherif y con Margarita Xirgú, Enrique Borrás y Amalia Sánchez Ariño en los principales papeles.
 En 1950 fue llevada a escena por Ingmar Bergman en Estocolmo.
 En 1961, José Tamayo la dirige con Nati Mistral, Manuel Dicenta,
 Milagros Leal, y Carlos Ballesteros en los papeles principales. José Tamayo la    volvería a llevar a escena en 1969 con Mary Carrillo y Manuel Galiana entre  otros y en 1998 con Kiti Manver, Pedro Mari Sánchez y Alicia Hermida en los papeles más destacados.
 En 1963 fue dirigida por el mexicano Juan Ibáñez que la estrenaría en México, teatro El Caballito; posteriormente en 1964 en el Festival de Nancy (Francia).
 En 1964 se presentó en Buenos Aires, dirigida por Jorge Lavelli y con María Casares en el papel de Mari Gaila.
 En 1976 el argentino Víctor García la dirigió con Nuria Espert en el papel protagonista
 José Carlos Plaza la ha dirigido en dos ocasiones: en 1976 para el grupo vasco Orain y en versión operística en 1997 con música de Antón García Abril, estrenada en el Teatro Real de Madrid.
 En 1986Jose Tamayo la vuelve a dirigir con un reparto que incluye a Nati MistralManuel Gallardo, Maria Guerrero, Elisenda Rivas, Joaquin Molina, Juanjo Menendez.
 En 1998 Atalaya Teatro, con la dirección de Ricardo Iniesta, realiza un montaje que se mantendrá en gira hasta 2011 cerrando la misma en Pekin.
 En 2006 Gerardo Vera la dirige para el Centro Dramático Nacional con Julieta Serrano y Alicia Hermida en los papeles principales.

Versiones cinematográficas

§   Divinas palabras (México, 1978). Ficha técnica.
Adaptación: Juan Ibáñez. Director: Juan Ibáñez.
§   Divinas palabras (España, 1987). Ficha técnica.
Adaptación: José Luis García Sánchez y Enrique Llovet. Director: José Luis García Sánchez.

 Versiones operísticas

§   Divinas palabras (1992, estreno: Madrid: Teatro Real, 18 de octubre de 1997).
Libreto: Francisco Nieva. Música: Antón García Abril.




martes, 15 de mayo de 2012

Contextualización geográfica


La acción está ambientada en la Galicia rural, cerca de la Ría de Arousa ( se mencionan los topónimos Gondar, bretal, Padrón, Valga ...). Además de la Iglesia de San clemente, donde viven los Gailo, la acción tiene lugar en los caminos y veredas, en el lugar de Condes y en el de Viana del prior (nombre ficticio de A Poba do Caramiñal). La única escena interior es en el inicio, en la casa de los Gailo.


Obra


El autor cultiva los tres grandes géneros tradicionales: narrativa, lírica y teatro aunque con frecuencia no se ajusta a lo preceptivo en cada uno de ellos. Su prosa tiene profundos rasgos líricos, su teatro presenta descripciones y acotaciones propias de la novela, etc.

La obra narrativa desde la colección de cuentos "Femeninas" (1895) hasta la publicación de "Sonata de otoño" (1902) - considerada desde el principio una obra maestra - supuso el despegue definitivo del escritor gallego. Este éxito se vio confirmado con las tres Sonatas restantes.

La trilogía sobre la guerra carlista (1908-1909) reafirma el reconocimiento de Valle Inclán como gran escritor si bien la transformación de su prosa modernista hacia el esperpento se va operando desde "Los cruzados de la causa" y el resto de las obras de esta trilogía y el paso al esperpento narrativo será ya total con "Tirano Banderas" (1926) en la que hace una crítica feroz de una dictadura latinoamericana arquetípica y la serie inconclusa de "El ruedo ibérico" (1927-28), ciclo narrativo que da una visión grotesca de la reina Isabel II y su "corte de los milagros".

Valle publicó también cuentos y relatos de horror y de misterio que reunió en libros como Jardín umbrío y un ensayo de estética simbolista La lámpara maravillosa (1916) que ocupó el primer volumen de su Opera omnia.

En general, tanto las Sonatas como los relatos se inscriben plenamente en la estética modernista.
El decadentismo modernista alcanza su plenitud en las Sonatas, "Memorias amables del marqués de Bradomín" en las que juega un papel trascendental el erotismo decadente.

En general, en su prosa modernista Valle busca el principio parnasiano "del arte por el arte" y practicar "el culto simbolista de la alusión y de la sensación". Hay una búsqueda continua de la musicalidad al estilo de R.Darío y una huída consciente y continua del realismo y el utilitarismo.

En 1904 se publicó "Flor de santidad" una bellísima novela precedida de un soneto de Antonio Machado. El escenario es la Galicia rural, sus gentes supersticiosas que viven en una atmósfera legendaria y mágica.

La visión que tiene Valle de la España de su tiempo es cada vez más sombría y negativa y el reflejo de esta visión está en su obra pero el cambio que va del ambiente refinado y de lujosa voluptuosidad de las Sonatas a la mascarada grotesca de El ruedo ibérico no se hace a través de una ruptura tajante y brusca entre un estilo y otro sino gradualmente. Incluso en las Sonatas varios críticos han sabido ver el germen del esperpento en ciertas expresiones irónicas, escenas macabras, animalizaciones.. En las dos primeras comedias bárbaras y en la trilogía carlista, la exaltación de lo legendario se mezcla con la violencia, la crueldad y el lenguaje desgarrado. En esta obra se desarrolla el bárbaro proceso de degeneración de un linaje. También "La pipa de kif", libro de dieciocho poemas aparecido en 1919, es un precedente claro. Salinas lo califica de "preludio en verso del esperpento".

Valle expuso los nuevos conceptos estéticos en tres textos sobradamente conocidos: Max Estrella (escena XII de Luces de Bohemia), Don Estrafalario en el prólogo y epílogo de Los cuernos de Don Friolera y la célebre entrevista al periodista Martínez Sierra aparecida en el diario ABC el 3 de Diciembre de 1928.

Respecto a la cronología del esperpento hay que señalar 1920 como un año decisivo. Aparecen cuatro obras del autor: una tragicomedia de aldea Divinas palabras, esperpento rural y que está considerada obra maestra del teatro universal; dos farsas, Farsa de la enamorada del rey y Farsa y licencia de la reina castiza, y un esperpento, Luces de bohemia.

La trayectoria dramatúrgica de Valle Inclán no sigue un proceso lineal. "Entre Los cuernos de Don Friolera" (1921), alegato antimilitarista, y "La hija del capitán" (1927) dos esperpentos que constituyen con "Las galas del difunto" el titulado "Martes de carnaval". Valle Inclán escribió "Cara de Plata" (1922) la última de sus Comedias bárbaras.

Durante estos mismos años veinte compuso en la tradición granguiñolesca autos y melodramas para marionetas: "Ligazón" (1926), "La rosa de papel" y "La cabeza del Bautista" (1924) que, junto con "El embrujado" reunió en su Opera omnia con el título "Retablo de la avaricia, la lujuria y la muerte."

Algunas de las portadas de los libros del autor: